144.-Así empezó todo..

Mi abuelo Andrés era herrero..Porque su padre lo había sido y en aquella época se daba por hecho que tenías que seguir la tradición familiar..
Me acuerdo perfectamente de la fragua de mi abuelo..de sus herramientas nada modernas..  poco pretenciosas y escasas..De verlo trabajar..poco..porque ya era mayor y lo hacía solo para encargos o favores..
De la poca luz que había dentro..De que nos dijera que cerraramos los ojos cuando soldaba algo para que las chispas no nos molestaran en los ojos..
Del olor a hierro quemado y el olor a fuego..
De las historias que nos contaba.. Que seguramente le volvían a la memoria al usar el martillo o el cincel para retocar algo..Historias duras..de como la gente lo pasaba mal después de la guerra y de como el ayudó a algunos con lo poco que también tenía..Por ejemplo con los sacos de carbón vacíos..para protegerse del duro frío del pueblo..
Nos contaba también..como tenía que seguir trabajando incluso con 'heridas de guerra'..propias del duro oficio..porque alimentar la familia era lo primero..
A pesar de lo sufrido de su trabajo..nunca fue una persona tosca o desaliñada..Al contrario..la persona más aseada y limpia que conocí..Eso también nos lo inculcó..
Recuerdo los veranos cuando era pequeña ir a casa de mis abuelos temprano.. y ver a mis tíos..Que no siguieron con la tradición..pero que en vacaciones le echaban una mano al abuelo en la fragua..
Y a eso de media mañana mi abuela preparar el desayuno..o el bruch..Porque eso no eran desayunos normales..Había de todo..Huevos fritos con ajos..chorizo y morcilla..Pan y tortas recién hechas de la tahona..quesos..leche..Lo recuerdo y se me saltan las lágrimas..
Y lo mejor de todo era el olor..Ese olor a comida sencilla..básica..sin lujos..Hecha por tus abuelos..A la comida que no se da importancia en ese momento pero  que vas a recordar el resto de tu vida..
Yo no recuerdo exactamente la edad que tenía..Pero era bastante pequeña..Mís tíos me sentaban en sus piernas y mojabamos el huevo frito con pan recién hecho y jugabamos a pelearnos por el último trozo de huevo..que siempre era para mí..Siempre que veo a mis tíos lo comentamos y nos hace gracia..
Allí empezó mi amor por la comida..Por querer aprender..por preguntar..por mirar como las manos expertas lo hacían sin darse ni cuenta..por querer copiar esos sabores y esos olores..En definitíva..por no querer olvidar..
Me encanta cuando en verano vamos al pueblo y llevo a mis hijos a comprar pan a la tahona o al bar de Magán a comer choricillo o a casa de  mi madre para que nos prepare alguna de las recetas antiguas..como ella dice..Saborear una vez al año esa comida que me sigue sabiendo a gloria.. Y recordarles a mis hijos hasta la extenuación lo que me gusta..De las mejores cosas de las vacaciones..Me gusta que ellos disfruten con lo que disfruto yo..
Ellos han heredado la misma pasión por la comida que yo..Saborean..tienen criterio..son objetivos y disfrutan..Son dos mini gourmets..No sé si alguno me saldrá cocinero también..
Hace poco publiqué en facebook la foto donde me daban el título del curso de cocina que he terminado..Y nunca una foto tuvo tanto éxito..Todo el mundo me felicitó  y se alegraban por mi..
Yo casi que lo vi exagerado..Es un simple título..Pero en realidad me sentí como si me dieran un novel..Reto superado..




Recuerdos..Eternamente Yolanda..